1937
"Cisnes que se reflejan como elefantes" de Salvador Dalí.


La obra de Salvador Dalí está fuertemente influenciada por el psicoanálisis y, en un intento de pensar más allá de Freud, Dalí teorizó lo que luego denominaría como el método paranoico-crítico, una propuesta para poner la paranoia al servicio de la creatividad. Esta idea luego sería rescatada por el psicoanalista francés Jacques Lacan y tendría influencia en la propia teoría lacaniana de la paranoia evidente en su tesis doctoral “De las psicosis paranoicas y de su relación con la personalidad” (1932).
El método paranoico-crítico consiste en invocar un estado paranoico en el observador, el resultado es una deconstrucción del concepto psicológico de identidad, de modo que la subjetividad se convierte en el aspecto principal de la obra de arte. Estas imágenes ambiguas provocan múltiples interpretaciones en el observador, haciendo que éste libere obsesiones, fobias y todo lo que lleva guardado en el subconsciente. La realidad es en definitiva la realidad que cada uno ve (la que nuestro inconsciente nos lleva a ver) y Dalí estaba convencido de ello, según sus propias palabras “lo que vemos en las cosas no está en las cosas, sino en el fondo de nuestra alma”.